El Libro
o Los Documentos de Urantia son un texto publicado en 1955. Consta de 196
Documentos y sus autores afirman ser seres celestiales.
Quizás para algunas personas esta sea la dificultad inicial para explorar esta publicación. Tanto para la Ciencia como la Religión actúan dos barreras mentales inmediatas ante esta afirmación:
Quizás para algunas personas esta sea la dificultad inicial para explorar esta publicación. Tanto para la Ciencia como la Religión actúan dos barreras mentales inmediatas ante esta afirmación:
La
ciencia oficial niega la comunicación extraterrestre pero no descarta la
existencia de estos seres. Sin embargo, hay toda un área investigativa que se
ha ido abriendo poco a poco que incluso incluye a las fuerzas militares de las
naciones y está mas dispuesta a no descartar que ciertas inteligencias
superiores al hombre podrían ponerse en contacto con los humanos.
En la otra vereda, la religión cristiana (entre otras) desconfía de otros libros revelados fuera de la Biblia ya que la tradición religiosa de siglos configura la existencia de "libros
sagrados". Ademas hay quienes ven actividad demoníaca en cada evento que
exceda el área delimitada por la tradición y el canon bíblico. Sin embargo,
aunque las porciones internas de la Biblia contienen gran material espiritual revelado, la tradición y el Canon (agrupación de libros) son construcciones
puramente humanas. No hubo inspiración divina en seleccionar que libros o no agruparían a la Biblia. Sí, la agrupación es una cosa, y el material interno es otra.
La misma
Biblia en su proceso gradual interno de Ajuste y creación tuvo la contribución de seres
celestiales. Se afirma:
“ley que fue promulgada
mediante ángeles por mano de un mediador” – Gálatas 3:19.
Pero hay
quienes sostienen una imposibilidad también basada en Gálatas:
“Pero si
aun nosotros, o un ángel del cielo, os anunciara otro evangelio contrario al
que os hemos anunciado, sea anatema” –Gálatas 1:8.
No
obstante, notemos que el quid de lo que publicaba el Apóstol no era la
imposibilidad de que fueran ángeles los que en el futuro dieran mensajes, por
que si fuera así también estaría descartada la proclamación de humanos: "si aun nosotros".
Mas bien
se refiere a dar un mensaje de buenas noticias distinto al que habían predicado
sobre Jesús. Es mas, otros apostoles declaran:
“y todo espíritu que no
confiesa que Jesucristo ha venido en carne, no es de Dios” – 1 Juan 4:3
(A diferencia de las ideas gnósticas, el Libro de Urantia dedica una cuarta parte completa a la vida humana de Jesús de Nazaret)
Por lo
tanto, en las Escrituras Bíblicas no se niega la posibilidad sobre que seres celestes sigan comunicándose, ya que el Apocalipsis a Juan, fue una Revelación que incluyó medios
angelicales. Y este libro de Revelación de Juan es muy posterior a las advertencias de Pablo.
Nada indica que este proceso se haya detenido.
Los Documentos de Urantia, a diferencia de otras revelaciones, han sido entregadas por una pléyade o conjunto de varios seres celestiales que exponen en los Documentos. La cuarta parte fue autoría de unos seres llamados "intermedios" o Midwayers.
Como ya habrá intuido el lector, los Documentos están divididos en cuatro partes de exposición:
1- Primera Parte: El universo
central y los superuniversos
2- Segunda Parte: El universo
local
3- Tercera Parte: La historia
de Urantia
4- Cuarta Parte: La vida y
las enseñanzas de Jesús
Estos Documentos fueron entregados en los años treinta del siglo XX y custodiados hasta 1955, el año de su publicación por la Fundación Urantia. Esta Fundación no es una religión, sino simplemente la Casa Editorial y Custodia del texto y promotora de su traducción.
Hoy no hay tradiciones religiosas o sociales de siglos vinculadas al Libro de Urantia, así que este debe ser evaluado por su contenido interno, por el fruto espiritual que produce y por la coherencia de su material expuesto, además de los sorprendentes hechos de verificación histórica y científica que están validándolo.